Un viernes muy casual
A partir de hoy se implementó en la empresa el famoso Casual Friday, donde cada uno puede ponerse "lo que quiera". Hay quienes vinieron con la camiseta de Cambaceres, la mini
super mini, las Topper que dejaron de usar en el 94 (y nunca más lavaron)...
Cuando me había adaptado al contexto, llegó un cliente con su socio. "Esa espalda la conozco", me dije... la Pasante Culona me hablaba y hablaba, pero esa espalda... yo la conocía.
Otra vez había caído mi Ex en mi vida. Él trabajaba en esta empresa y renunció cuando nos separamos, entonces ahora el boludo de mi jefe lo había llamado para hacerle no sé qué descuento en no sé qué cosa, parece que pintaba un buen negocio entre ellos. La
reunión fue horrible... no presté ni un poco de atención. El Powerpoint de mi jefe fue inútil. Yo tomaba café con la mirada perdida en la pantalla. El muy boludo me podría haber avisado
que venía.
Cuando salimos de la sala, ahí estaba el Cadetito. Moría de ganas de darle un beso, pero por la política de la empresa no podía. No sé si mis ganas de estar con él se debían al deseo de
que mi Ex muriera de celos o a haber extrañado a ese bombón (hacía varios días que no nos veíamos). El Cadetito me vió y se acercó: "¿salimos a almorzar?", me dijo. Atrás mío estaba mi Ex, el cual acotó "no perdés el tiempo, eh".
El Cadetito se fue sin pedir explicaciones y sin escuchar mi "sí" en respuesta su pregunta.
Mi terapeuta me dijo que mi Ex me busca. Que es tiempo para que me divierta y la pase bien. Sola o con quien quiera... "pero divertite, nena".Se nota claramente que la terapeuta la está pasando muy muy bien!